martes, 18 de noviembre de 2008

Fears

Recapitulando, revisando mi miedo del domingo, observo cuan fácil es elegir que nada cambie, optar por quedarme donde estoy con tal de no tener que enfrentar el miedo que le tengo a lo desconocido.
Me caracteriza ese conformismo. Si no estamos tan mal, tal vez sea mejor quedar como estamos. No vaya a ser....
Cada día estoy más convencida de que le tengo más miedo al éxito que al fracaso. Es fácil imaginarse que las cosas NO van a funcionar, que nada va a salir como planeado, que un imprevisto va a derrumbar el castillo. Lo que me supera es imaginar que las cosas SI pueden funcionar, que hay lugar para que las cosas mejoren, para que lo sueños se hagan realidad.
Que cursi me levanté hoy...
Miedo.
Me paraliza. Habrá que empezar a combatirlo.
Y que la realidad supere a la ficción.


domingo, 16 de noviembre de 2008

Muerta de miedo...

miércoles, 12 de noviembre de 2008

We must be willing to get rid of the life we´ve planned, so as to have the life that is waiting for us.
Joseph Campbell

Hace pocas semanas me encontré pensando en que soy una de las personas más felices que conozco. Y digo esto porque llegué a la conclusión de que son pocas las personas que hacen tanto lo que se les canta en la vida como yo.
Creo que esa es la clave: hacer lo que uno quiere, lo que uno tiene ganas de hacer, dejarse llevar por las oportunidades que se nos ponen delante y saltar al vacío cuando las circunstancias lo ameritan.
Soy una persona feliz - a pesar de mis episodios de depresión en que quisiera quedarme encerrada en casa, metida en la cama hasta el año que viene, o hasta que mi principe azul me venga a tocar la puerta. Hay veces en que me siento presa de mi propia realidad. Creo que a todos nos pasa en mayor o menor medida. Pero somos pocos los que nos damos cuenta de que en nosotros está siempre la posiblidad del cambio. Un paso alguna dirección y de ahí se desencadena un espiral de movimientos. Saber que está en mis manos me hace sentir en control de mi vida. Y eso me hace feliz. A pesar de que muchas veces no me animo a dar el paso---



lunes, 10 de noviembre de 2008

Motivaciones

En menos de 24 horas voy de la electrónica al ballet. Las dicotomias me caracterizan.
Me atraen los extremos. Diría que nutren mi vida y su ausencia genera inmensos baches de aburrimiento que derrumban mi existencia en una depresión galopante.
Necesito vivir la vida con emociones. 
De pronto están pasando muchas cosas. No sé bien dónde quedo yo parada en medio de todo esto. De todas maneras, dejo que la corriente me lleve.
Vuelven las coincidencias, vuelven las predicciones, vuelven los deja vu y la sensibilidad extrema.
Hace un rato dije por ahí que quiero empezar a ser otra. Pero la verdad es que quiero dejar de ser la otra para empezar a ser yo.

viernes, 7 de noviembre de 2008

Algunos placeres

Los primeros calorcitos del verano - son los únicos que me banco. 
Poder escapar sin remordimientos de la oficina antes de las 3 de la tarde, un viernes, y en el camino encontrar una nube arco iris, pero sin una gota de lluvia.  
Satisfacción interna por las tareas cumplidas.
Un buen libro, cerca del final, que me espera en la cartera.
El regreso de Lola.
Y tu presencia, incluso cuando no estás.


miércoles, 5 de noviembre de 2008

Election day


Me gustaría poder escribir com conocimiento, profundidad y coherencia acerca de la elección del nuevo presidente de los Estados Unidos, pero me resulta imposible. Imposible por mi gran ignorancia en el tema, porque hago agua fácilmente hablando de política y porque creo que mi manera de mirar el mundo y sus realidades es naif, ingenua y curiosa y no analista, aguda ni completa.
Pero de todas maneras disfruto de todo lo que está pasando con la conciencia de que estoy presenciando la historia "in the making". Que Estados Unidos tendrá su primer presidente negro. Que un pueblo se ha volcado a las urnas como nunca antes porque creyó que era necesario el cambio y confió en que podía marcar una diferencia.
Siempre estuve cerca de los Estados Unidos. Física y metafóricamente. Tengo amigos norteamericanos, trabajé y trabajo para empresas norteamericanas y mi registro de entradas al país es incalculable después de casi 10 años como azafata; poseen la ciudad de mis sueños, industrias que admiro, marcas que compro (y acá de nuevo, no hablo sólo desde lo literal, cuando digo comprar es que les hago el aguante)... Soy muy gringa para algunas cosas, les tengo bastante más tolerancia que el promedio y los conozco bastante de cerca.
Y hoy además, estoy orgullosa de ellos.