sábado, 13 de febrero de 2010

Sábado

Todavía despertando en la mañana de sábado me encuentro en el diario con un artículo de Vargas Llosa sobre libros y escritores, y otro de Sergio Ramírez homenajeando a Eloy Martínez. Me descubro leyéndolos en voz alta, como me suele suceder con textos tan inmensos que resuenan demasiado dentro de mi cabeza y tengo que sacarlos para afuera. Casi como si me desdoblara y hubiera alguien que me lo estuviera contando.

Estos textos tienen repercusión física sobre mí. Me ponen la piel de gallina, me quiebran la voz, me hacen derramar una lágrima. Alguna vez bautizada mujer de hielo, esta mañana me desarmo apenas con palabras.

2 comentarios:

somuchso dijo...

Me encantó!

Au drey dijo...

Piedra libre, piedra libre.
¿Puedo dejar un secreto acá? Yo leo también en voz alta desdobladamente. Y a veces cocino como si lo hiciera para alguien más, y luego lo como como si lo hubiera hecho otra persona. Las maneras de multiplicarse, que le dicen.
(mi palabra de estreno en tu blog es mating!)